FAPE MÁLAGA 20.04.2023 | A medida que el mundo del periodismo continúa evolucionando, somos testigos del surgimiento de nuevas tecnologías e innovaciones que están cambiando la forma en que nos comunicamos y preparamos las noticias. Una de esas tecnologías que genera muchos titulares son los chatbots impulsados por la tecnología GPT (Generative Pre-trained Transformer). Si bien estos chatbots ofrecen un potencial significativo para la industria de los medios, también plantean desafíos únicos para los periodistas, afirma la Federación Internacional de Periodistas (FIP), a la que pertenece la FAPE, en su editorial de abril.

Por un lado, los chatbots pueden permitir a los periodistas automatizar tareas rutinarias como la verificación de hechos, resúmenes de artículos y traducciones. Esto podría liberar el tiempo de los periodistas para que se concentren en tareas más complejas, como el periodismo de investigación y el análisis. Los chatbots también podrían ayudar a las organizaciones de noticias a interactuar con sus audiencias de maneras más interactivas y personalizadas.

Por otro lado, los chatbots corren el riesgo de promover inadvertidamente información errónea y noticias falsas. Si no están diseñados con las regulaciones y limitaciones adecuadas, pueden difundir información falsa y contribuir a la erosión de la confianza pública en los periodistas y las organizaciones de noticias. Además, podrían potencialmente reemplazar a los periodistas, quitándoles la seguridad laboral y dejando a muchos sin trabajo.

La FIP considera que es ahí donde el papel de los sindicatos y asociaciones de periodistas se vuelve crítico, ya que pueden desempeñar un papel en la configuración de la regulación y la implementación de chatbots en la industria de los medios.

A través de la colaboración entre la industria de los medios, las empresas de tecnología y los sindicatos y asociaciones de periodistas, se puede desarrollar un marco para el despliegue ético y la regulación de los chatbots, al mismo tiempo que se asegurarían puestos de trabajo. “Al trabajar juntos, podemos garantizar que los chatbots sirvan al interés público y mejoren, en lugar de socavar, los valores fundamentales del periodismo”, aseguran desde la FIP.