El señalamiento de periodistas, venga de donde venga, afecta directamente al derecho a la libertad de expresión, pilar irrenunciable de la democracia que debe ser respetado y garantizado, en especial por aquellos que ejercen responsabilidades de gobierno (Iglesias) y parlamentarias (Echenique).
En un Estado de derecho como el nuestro, es inadmisible que se trate de coartar la independencia de los periodistas recurriendo a la estrategia de los señalamientos, una estrategia que, amplificada en las redes, resulta muy dañina, ya que pretende debilitar el prestigio y la credibilidad de los profesionales de la información.
La FAPE manifiesta su solidaridad con los periodistas afectados y estima que la mejor forma de responder a estas estrategias es con información veraz, verificada y contrastada con fuentes fiables».