La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) se une a la Federación Internacional de Periodistas (FIP), a la que pertenece, y a su afiliada, la Federación Colombiana de Periodistas (FECOLPER), en su rechazo al atentado sufrido por el periodista Felipe Guevara Henao, fallecido el 23 de diciembre después de ser atacado a balazos por sujetos no identificados en la ciudad de Cali, al suroeste de Colombia. Las tres organizaciones profesionales exigen una investigación que lleve a los atacantes ante la justicia.

“Ningún periodista debe sentirse inseguro en su lugar de residencia, y tampoco debe verse obligado a abandonarlo para proteger su vida. Condenamos este asesinato y exigimos a la justicia colombiana que proceda para encontrar a los asesinos de Felipe Guevara y los lleve ante la justicia. El asesinato de periodistas no puede quedar impune”, ha afirmado el Secretario General de la FIP, Anthony Bellanger.

Felipe Guevara, que trabajaba como periodista judicial del Diario Q’hubo desde hace tres años, falleció dos días después del atentado en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de una clínica de Cali tras dos cirugías de urgencia por los impactos de bala que recibió, según comunicó el periódico al conocerse su deceso.

De acuerdo con los informes policiales, Guevara recibió cuatro disparos: dos de ellos impactaron en el estómago, uno en el tórax y otro en una de sus piernas. El ataque se habría producido con un arma de fuego industrial, según declaraciones del alcalde de la ciudad, Jorge Iván Ospina.

Entre las hipótesis que se manejan sobre las causas del crimen se encuentra la situación de inseguridad en el barrio Mariano Ramos, ubicado en la Comuna 16, al oriente de la ciudad y a donde Guevara había regresado poco tiempo antes de morir.

El comunicador, de 27 años, abandonó dicho sector por amenazas de muerte que ya había denunciado en 2017, después de publicar diferentes notas de prensa sobre bandas criminales que operaban en la zona.

Para dar con sus atacantes, la policía colombiana está ofreciendo una recompensa de 50 millones de pesos (unos €11.773) para cualquier ciudadano que dé información sobre el asesinato del periodista y sus atacantes.