Corregir una afirmación falsa da menos credibilidad a los periodistas
Un estudio reciente revela que los usuarios confían más en los periodistas que confirman afirmaciones a los que las desmienten
4 septiembre, 2024

¿La gente confía en los periodistas que realizan verificaciones de hechos? Basándose en la investigación sobre el sesgo de negatividad, dos estudios apoyan la hipótesis de que la gente generalmente confía en los periodistas cuando confirman las afirmaciones como verdaderas, pero desconfía relativamente de los periodistas cuando corrigen afirmaciones falsas. La percepción de que el periodismo es parcial, sensacionalista y a menudo deshonesto ha llevado a que la confianza pública en la prensa haya disminuido significativamente. Para contrarrestar estas percepciones, muchas organizaciones de noticias han intensificado sus esfuerzos en la verificación de datos, con la esperanza de que una rigurosa verificación de la información pueda ayudar a recuperar la confianza del público. Sin embargo, la investigación de Stein y Meyersohn sugiere que estos esfuerzos pueden estar teniendo un efecto contraproducente.
El estudio, publicado en Communication Research (revista académica bianual sobre información), revela que las personas tienden a confiar menos en los periodistas cuando corrigen información falsa o desmienten afirmaciones, en comparación con cuando confirman que una afirmación es verdadera. La investigación, titulada Whose Pants Are on Fire? Journalists Correcting False Claims are Distrusted More Than Journalists Confirming Claims, y realizada por Randy Stein y Caroline E. Meyersohn, de la Universidad Estatal de California, se enmarca en un contexto de creciente desconfianza hacia los medios de comunicación, un fenómenos que se ha intensificado en las últimas décadas.
En el Estudio 1, los participantes, 691, leyeron una verificación de hechos real que corrigió o confirmó una afirmación sobre política o economía. En el Estudio 2, los participantes leyeron un informe real que corrigió o confirmó una afirmación de marketing sobre uno de varios productos. Los participantes en ambos estudios tenían niveles más altos de desconfianza hacia los periodistas que proporcionaban correcciones, percibiéndolos como más propensos a mentir y tener motivos ocultos. Este efecto se mantuvo incluso entre las correcciones que coincidían con las creencias previas de los encuestados (es decir, para afirmaciones que los participantes pensaban que podrían ser falsas).