La guerra del ultraderechista Javier Milei contra el periodismo se traslada ahora al corazón del poder argentino, la Casa Rosada. El portavoz presidencial, Manuel Adorni, ha anticipado que el Gobierno trabaja en una resolución para restringir el acceso a la sala de conferencias y sólo permitir en ella a “periodistas de fuste, con experiencia y de medios altamente reconocidos”, según recoge el diario El País.

«Vamos a hacer una sala de prensa de élite, de periodistas que puedan demostrar que merecen estar cerca del presidente de la nación», declaró Adorni al canal LN+. El portavoz aseguró que durante años la decisión de acreditar o no a un medio «se ha manejado a dedo» y que a lo que aspira el Ejecutivo argentino es a emular a la Casa Blanca en la búsqueda de «excelencia».

El Gobierno de Milei está embarcado en una guerra contra el periodismo. Este no es el primer intento de controlar la actividad libre de los profesionales. Ya hubo polémica con la agencia de noticias Télam. Tras 128 días de lucha contra el intento del gobierno argentino de cerrar la histórica agencia estatal de noticias Télam, sus trabajadores volvieron este 10 de julio a sus lugares de trabajo para evitar el cierre definitivo del medio. La Federación Internacional de Periodistas celebra este logro, fruto de la lucha organizada y con sólidas convicciones, y apoya la continuidad de sus reclamos por la defensa de los medios públicos.

El pasado 3 de marzo, el presidente Milei anunciara que cerraría la agencia, las y los colegas llegaron a sus oficinas y encontraron a la policía estableciendo un vallado que impedía que nadie ingresara a ninguno de los dos edificios donde funcionan sus instalaciones. Desde el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBa) y FATPREN, afiliada a FIP, se impulsaron diferentes acciones de lucha , incluyendo asambleas, paros, recolecciones masivas de firmas en apoyo a la continuidad de sus fuentes de trabajo, reuniones. con legisladores y dirigentes políticos, sociales y sindicales, y un campamento sostenido las 24 horas en la puerta de ambas sedes durante 4 meses.

Cerrado el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad

La Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) denuncia que el Gobierno argentino ha dado una nueva vuelta de tuerca a su plan de llegar a los 75 mil despidos laborales en la administración pública y ha dispuesto no renovar contratos vencidos a fines de junio, lo que representa 25 mil nuevos despidos.

En el ex Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad se despedido a 490 empleados y se ha frenado el presupuesto en acciones como el Programa Acompañar, creado para dar apoyo económico, legal y psicológico a las víctimas de violencia de género, que ha perdido al 50% de las personas que trabajaban en él.